Análisis modelos y tipos de Cloud en el Mercado TI
Durante muchos años los servicios de computación se han encontrado localizados dentro de los Data Center corporativos. Esta modalidad ha obligado siempre a las empresas a realizar un desembolso económico previo que daba paso a tiempos de espera de recepción de material y licencias al que se sumaba el esfuerzo interno asociado en implantar y configurar la solución, añadiendo un plus de complejidad de los proyectos, ya que era muy complicado hacer un dimensionamiento adecuado de la infraestructura: En la mayoría de los casos se sobredimensionaban con el sobrecoste que esto conlleva.
Hoy en día con el auge del Cloud Computing toda la perspectiva y los tiempos de despliegue de proyectos se reducen drásticamente a favor de los equipos de TI, siendo capaces de dar una respuesta ágil a las necesidades del negocio ante nuevas campañas o retos internos.
Las bases sobre las que se asientan los principios del Cloud Computing son cuatro, y estas reflejan sin duda el espíritu de negocio que requieren las empresas hoy en día sin importar su tamaño o la actividad a la que se dediquen:
- Costes: Se adapta a las necesidades reales del negocio eliminando el sobrecoste de reserva de computación. No requiere inversión inicial y suprime costes indirectos e incluso, si se necesita, costes de expertos de TI para administrar la infraestructura.
- Velocidad: Aumenta vertiginosamente el Time to Market de implementación, escalando incluso cientos de recursos de manera global.
- Seguridad: Los principales actores cumplen ex ante con los mayores estándares de seguridad y control del mercado debido a los clientes o plataformas que alojan, tales como la certificación PCI DSS, ISO 9001, 27001, 27017 y 27018.
- Escalabilidad: Gracias al Cloud Computing y a sus servicios de auto escalado, el usuario final no debe preocuparse del dimensionamiento de sus máquinas, estas se ajustan a cada fase del proceso productivo para ser más efectivas.
Si usted como lector tuviera que nombrar los principales proveedores de Cloud Computing a nivel mundial, coincidiría con la mayoría de las personas y medios especializados señalando a Amazon Web Services, Microsoft y Google dentro de esta quiniela. Existen además otras especializadas como Oracle Cloud Infraestructura (OCI), orientada a la gestión de dato, y avalada por su dilatada trayectoria en este tipo de servicios. Estas empresas absorben la mayor parte del negocio del Cloud Computing y realizan anualmente inversiones millonarias en infraestructura, nuevos servicios e investigación. Estas inversiones responden a que la rentabilidad ofrecida por este modelo de negocio está disparando sus beneficios, y a que estas empresas comprenden que ganar la batalla y posicionarse privilegiadamente en la nube ahora supondrá obtener una parte “del pastel” millonario que ya es y que se prevé que continúe escalando sin interrupción durante la próxima década.
Usualmente se relaciona el Cloud Computing con modelos de servicios alojados en inmensos Data Centers, cuyo flujo de datos y transferencia de información se realiza únicamente vía Internet y donde todo el hardware, software y demás componentes son propiedad del proveedor de la Nube además de ser compartidos por otros “inquilinos”. Ciertamente esto es real para el modelo denominado Nube Pública, pero actualmente podemos encontrar otras dos opciones muy extendidas en el entorno empresarial: Nube Privada donde los recursos informáticos, servicios y esfuerzos de la administración son para el uso exclusivo de una única organización y la Nube Híbrida donde se combinan los modelos Públicos y Privados beneficiándose de las ventajas de ambas y permitiendo que los datos, cargas de trabajo y aplicaciones puedan moverse según la necesidad de la empresa en cada momento.
Si intenta trasformar los beneficios operativos del Cloud Computing a beneficios empresariales o como piedra angular en un modelo de negocio puede encontrar tres puntos clave:
- Agilidad Empresarial: Permite obtener los recursos informáticos necesarios cuando se necesitan. Esto acorta los proyectos de TI, lo que permite un tiempo de comercialización más rápido y más predecible, siendo posible entregar resultados más rápido, más baratos y con mayor calidad. Lo que esto supone para la empresa es una mayor agilidad y, en resumen, una ventaja competitiva.
- Nuevos modelos de negocio: Hace mucho más fácil arrancar iniciativas de innovación empresarial, a menudo habilitadas por servicios en la nube fácilmente disponibles. También fomenta crear compañías que están construyendo modelos de negocios y propuestas de valor completamente novedosas utilizando únicamente servicios en la nube.
- Mejor uso de los recursos: Tanto los recursos de personal, ya que permite que los empleados dediquen su tiempo a otras actividades más útiles – más especializadas para su negocio – que pueden ofrecer un mayor valor potencial para la compañía, como los recursos de TI, que crecen o decrecen según la necesidad del servicio siendo esta variación incluso desatendida.
Si la agilidad empresarial y el mejor uso de recursos de TI se encuentran muy ligados a modelos IaaS (Infraestructure as a Service), PaaS (Platform as a Service) y SaaS (Software as a Service), la evolución a procesos y aplicaciones basados en microservicios está virando la tendencia a un nuevo concepto: CaaS (Container as a Service). Este permite administrar e implementar contenedores, aplicaciones y clústeres a través de la virtualización basada en dockers bajo el estandarte de Kubernetes, Docker Swarm, Mesos u OpenShift como principales orquestadores de la solución.
Si tenemos en cuenta el crecimiento constante que el Cloud Computing viene encadenando los últimos años y las predicciones optimistas en la cuota de mercado, podemos suponer que la variedad de servicios, principalmente PaaS y SaaS, continúen simplificándose. Al mismo tiempo, los costes generales disminuirán, a favor del usuario.
Al tiempo que los servicios generales se generalizan y simplifican, los proveedores intentarán diferenciarse respecto a sus competidores mediante una mayor especialización en ciertas áreas, posicionándose preferentemente en ciertas modalidades o casos de uso. Esa diferencia no tiene por qué ser exclusivamente un producto o desarrollo propio, sino que también puede depender de un soporte o una comunidad que la apoye y la evolucione dándole mayor valor añadido.